El tiempo de espera habitual de la empresa de transporte es 60 minutos, dado que el pasajero normalmente tiene que pasar el control de pasaportes, recoger el equipaje, etc.
En ocasiones, en función del tamaño del aeropuerto, este tiempo se puede reducir a 30 minutos (en aeropuertos pequeños) o ampliar a 90 minutos (en aeropuertos grandes).
Si el vuelo llega a tiempo y el cliente no se presenta al traslado en ese tiempo, el caso será considerado como un "no-show".
Si el vuelo se retrasa, la empresa de transporte hará un seguimiento de la demora, y si el tiempo es insignificante, el cliente aparecerá dentro del plazo establecido.
Si el retraso es mayor (2-3-6-12 horas), la empresa tiene derecho a rechazar la reserva si:
- El vehículo no está disponible a la nueva hora.
- El bus lanzadera está lleno y no tiene plazas libres o el horario es muy exacto.
- El horario de buses lanzadera no tiene frecuencia nocturna.
Si el coche no es de lujo o de gama exclusiva, se podrá cambiar por otro coche que esté disponible.
Sin embargo, estos casos pueden variar en función de la localización.
El cliente tiene que informar a la empresa proveedora de los retrasos, porque los monitores de los aeropuertos no siempre dan información adecuada.
Intui team
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